Koh Lipe

Y llegó el día de marchar. Recogí mis cosas y me dirigí al puerto para coger el barco a Koh Lipe. Recuerdo estar de mal humor. Me tocó sentarme en la última fila del barco, no tenía respaldo y estaba muy incómodo.

Por fin llegué a Koh Lipe. Mi primera impresión es que era una isla bonita, y no podía imaginar lo que me encantaría aquel lugar. Hice el check in en el hostel, dejé mi mochila y fui a comer.

Cuando terminé de comer volví al hostel. Y allí estaba, lo había dejado todo y me había lanzado a la aventura. Y mi pregunta entonces fue, ¿y ahora qué?

Bajé otra vez para dar un paseo y me encontré con una chica, estaba allí sentada. Me miró con sus preciosos ojos azules y me salió un tímido hi!.

Me presenté y me propuso ir a ver atardecer y a cenar juntos, ella, una amiga y yo. Me pareció una idea genial y quedamos en vernos en un par de horas.

Aproveché para ver un poco la isla, me duché y bajé para encontrarme con ellas. La chica con la que había hablado se llamaba Eva y era de la República Checa. La otra era Sara, de Badalona.

Vimos atardecer y fuimos a tomar algo. Luego a cenar y a jugar al billar. Acabamos en el puv Zodiac, donde celebraban una full moon party. Fue increíble.Meer informatie