Europa 2019

Llegamos en bus desde Cáceres, si bien el viaje duró cuatro horas, acá en Lisboa es una hora menos, así que comenzamos el día a las 6:30 am con su debido café y una coxinha para cada uno.

Por 6 euros y algo compramos un pase diario para usar el metro, allí partimos por la excursión urbana: las ruinas de una iglesia inmensa, el convento do Carmo, devastado por el terremoto de 1755. Desde ahí se ve el castillo de San Jorge, al que subimos más tarde.

También recorrimos un par de plazas como la de Dom Pedro IV o la de Figueira. La catedral de Lisboa también es una postal típica junto a los pequeños tranvías que pasan por su frontis a cada instante.

Subiendo hacia el castillo de San Jorge, uno se encuentra con muchas calles angostas, típicas de Europa con casas muy coloridas, y una de estas calles interrumpida por una excavación que descubre las ruinas de un teatro romano.

Tomamos el tren a Sintra donde pasamos el resto de la tarde (siguiente post), y de noche antes de dejar Portugal pasamos un pequeño local llamado The Beer Station, donde probamos un par de cervezas artesanales locales.

Acá en Lisboa el metro llega hasta el mismo aeropuerto, tal como en Madrid, pero sin pagar ninguna tasa extra.Leer más