Restaurante Malandros

Los restaurantes brasileños estaban en extinción en Santiago, uno a uno fueron cerrando por distintas circunstancias.

De quienes trabajaron en uno de ellos, formaron luego de un año un nuevo local ubicado en Manuel Montt cercano a la esquina de Alferez Real, en Providencia.

El local es grande, desde afuera parece que estuviera vacío ya que el hall de entrada tiene sólo memorabilia brasileña y algunas mesas vacías.

Pero al entrar al salón principal se puede apreciar una fiesta entre las distintas mesas; la gente baila, hay músicos que recorren mesa por mesa y todo el tiempo están preocupados de que la atención sea buena. Por el ruido de tal fiesta cuesta conversar, pero así es el ambiente brasileño.

No es barato, es como para ir en alguna ocasión especial. Pero todo está bien cuidado, el sabor de las longanizas es igual al sabor brasileño (calabresa, pimentada, etc), también los cortes de vacuno; acá la picanha de verdad es picanha con la capa de grasa alrededor que le da su sabor característico. En chile ese corte se llama Punta de Ganso, el problema es que le sacan la grasa antes de venderlo, y ahí es donde está el sabor.

Aún cuando había mucho adorno de Skol y Brahma, las cervezas eran nacionales chilenas. Todo lo demás era muy brasileño. Incluido el bajativo: cachaça.

Aúnque se puede pedir menú, y durante la hora de almuerzo hay colaciones. Nosotros pedimos el rodizio, lo que en Chile es un tenedor libre. Te sirves ensaladas y acompañamientos, mientras que el encargado de la parrilla te va a dejar distintas variedades de productos cárnicos: vacuno, embutidos, pollo y cerdo.

Quedamos tan llenos que preferimos volver caminando y así quemar unas cuantas calorías. Recomendable, si se tiene el bolsillo y las ganas de bailar.Read more