La Ofelia: El olor de la guayaba

La Ofelia: Patromonio Natural de la Sierra Nevada de Santa Marta.
Cuando uno llega al camino del Trompito, con una mochila inmensa, yo me pregunté.... que tú estabas pensando cuando reservaste este hostal??? Al culo del mundo es más llegar!
Primero se cruza el puente colgante.... luego se cruzar tres pequeño ríos saltando piedrita en piedrita y un kilómetro más tarde te recibe Aristóteles, un gordo burro.... bienvenida a la Ofelia.
Por suerte estaba Fabiola esperándome con una limonada bien fría.
Llegar a la Ofelia es renunciar al cualquier lujo conocido y aprender a disfrutar el lujo que te ofrece la naturaleza misma. Los olores de las flores, de los árboles, de las frutas, de los animales, del viento, la tierra. La brisa que canta para ti mientras te meces en la hamaca.
La Ofelia me acuerda a los fines de semana que pasábamos durante mi infancia en un campo llamado “Jacagua” en la región de Santiago, en la República Dominicana. Yo amaba el tiempo en Jacagua. Así como yo amo el tiempo en la Ofelia.
El señor Javier Vélez, el anfitrión, ha puesto todo el amor que tiene para dar para que sus huéspedes se sientan tan bienvenidos que al final de su estadía no se quieran ir del paraíso.
Sus árboles te abrazan y las flores te sonríen con una arrogancia que dice “yo se que somos bellas”.
Y para conquistar aún más mi corazón La Ofelia tienen una cabaña de Playa. El mar es parte de la paredes invisibles que cubren la cabaña.
La experiencia en la Sierra Nevada de Santa Marta es difícil de explicar con palabras.
Ya estoy calculando mis días de vacaciones en el año para volver....Læs mere