• Una pausa en el viaje para viajar

    21 mars 2023, Cuba ⋅ 🌬 26 °C

    Después de tres años viajando hicimos una pausa para volar a La Habana, donde disfrutamos muchísimo de la compañía de familiares y amigos, resolvimos asuntos pendientes, paseamos, continuamos con nuestro trabajo online y offline y claro que fueron infinitas las charlas. Era de esperar que en la tierra que nos vio nacer nos encontráramos con la mayor cantidad de personas que directa o indirectamente estaban más al tanto de nuestro periplo a lo largo del continente. Hasta amigos que no veíamos desde hace muchos años estaban pendientes de nuestras publicaciones, aunque en algunos casos se tratase de aquellos cuyas preferencias no tienen nada que ver con el mundo de los viajes.

    También nos fueron a ver personas que ya nos seguían en las redes sociales o los grupos de chat, esos que no solo tuvimos el placer de finalmente conocer, sino que también entablar conversaciones muy amenas y enriquecedoras; otros que ya hemos incorporado a nuestra larga lista de amigos.

    Estar en Cuba además nos estremeció. Caminar por las calles (más vacías que nunca), enterarnos de gente que ya no está u otros que pronto partirán, y volver a saborear la vida "estática" (maximizada por la crisis económica) nos sacudió de una manera que ya esperábamos, pero que su magnitud sobrepasó nuestra imaginación. El retorno temporal a una vida "normal" nos puso a pensar acerca de cuán impactante será cuando llegue el día en que tomemos la decisión de dejar a un lado esta vida nómada.

    Hemos hecho una pausa en el viaje para viajar, para viajar al pasado a través de los recuerdos y para hacer ese vuelo imaginario a un posible futuro que ahora lo vemos incierto y confuso. Lo que a muchos pudiera provocar estrés al plantearse emprender un viaje tan largo ahora es nuestra más relajante y cotidiana zona de confort, y esa rutina que la mayoría ve como normal ahora para nosotros representa motivo de incertidumbre y preocupación.
    En savoir plus