Después de 550 km llegamos a Viena, ya estamos en Austria. Por suerte compramos el sticker para circular por las autopistas austriacas, si no era una multa de 250 euros. Descansamos y salimos a caminar pero al rato nos agarró lluvia y granizo y tuvimos que volver. Mientras esperábamos salió una chica de una cucha de perro grande a colgar unas mantas que seguramente quería lavar. En una de las fotos se ve la cucha, pobre vive ahí. Por suerte paro la lluvia y nos fuimos a un parque a tomar cerveza. Apareció un polaco y pegó un grito para asustarnos, el pobre estaba borracho y nosotros ni nos inmutamos, pero a mi no me dio mucha confianza porque había otros polacos y nosotros solo éramos dos así que al rato nos fuimos. Maneje por seis horas y estoy cansado. Mañana hay muchas actividades que ya contaré. Le saqué una doró al coche que alquilamos, es un todoterreno muy cómodo.もっと詳しく
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Ahí está la ducha de perro donde vive una chica, increíble
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El Airbnb, debe ser del siglo 18
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El coche que alquilamos