Buscábamos una cosa y encontramos otra

Llegamos a Frontera Corozal con la intención de pasar la noche y mañana ir a la famosa zona arqueológica de Yaxchilan, a la que se accede desde este pequeño poblado navegando unos 30 km río abajo en lancha. Pues resulta que éste es uno de los pocos lugares turísticos de Chiapas que aún no se pueden visitar. De todas formas estuvimos un rato caminando por el borde del río y conversamos unos minutos con uno de los lancheros.

Nos llamó la atención que en un pueblo pequeño hubiera tantos taxis concentrados justo frente al embarcadero. También, desde que veníamos por la carretera, notamos gente caminando largas distancias, algunos solos y otros en grupos de entre tres y diez individuos, la mayoría de ellos hombres jóvenes. Hasta ahora habíamos visto que las personas, en los pueblos apartados, andan a caballo, en bicicleta, moto o carro; no es común ver tanta gente caminando por el borde de las carreteras.

Entonces nos dimos cuenta de qué se trataba todo al ver bajar de una lancha a un grupo de jóvenes, casi todos con una pequeña mochila, que parecían guiados por uno de ellos. Este río divide México de Guatemala, así que estos muchachos y muchachas usan las lanchas para cruzar la frontera sin documentos, como nos confirmó el lanchero con el que estuvimos hablando. En fin, que este punto en la geografía de México y Guatemala es de los más importantes en el camino de todas esas personas que vienen desde quién sabe dónde con el fin de alcanzar los Estados Unidos.Read more