Las Gachas

Este es un paraje natural muy curioso pues, con el paso del tiempo, se han formado en el lecho del río unos hoyos de diversos tamaños y profundidad. Estas piscinas naturales, que por su forma les llaman jacuzzis - aunque el agua no es caliente - sirven para refrescarse después de la caminata de 40 minutos desde el pueblo de Guadalupe. El sendero está empedrado y las vistas a la Cordillera Oriental son muy lindas, pero hay que protegerse bien del sol porque no hay sombra en todo el camino excepto por tres refugios para descansar.

El agua que corre es de apenas un par de centímetros de profundidad, pero la piedra que conforma la quebrada está cubierta de musgo y es muy resbaladiza, ideal para deslizarse por ella y caer en uno de los agujeros más profundos. Ahora, para caminar por allí y evitar caídas, todos usamos medias en lugar de ir descalzos (si no quieres mojar las tuyas, allí venden unas baratas).

En días festivos y fines de semana mucha gente visita el balneario, pero entre semana la experiencia de sumergirse en un "cráter" puede ser más privada. Es buena idea traer bastante agua y una merienda, aunque siempre hay algún vendedor ambulante ofreciendo bebidas y refrigerios.En savoir plus