DÍA 1
21. marraskuuta, Italia ⋅ 🌧 3 °C
El día empezó levantándonos y con papá recogiéndonos a las 10:00 de la mañana a Lucas, a Eva y a mí. De ahí fuimos a por Abu y tiramos directos al aeropuerto de Alicante. Como llegamos con tiempo de sobra hasta la una que salía el vuelo, aprovechamos para tomarnos algo.
El vuelo duró unas dos horas y fue genial; nos compramos un bocadillo tipo snack y bebida que la verdad estaba bastante bueno.
Al llegar al aeropuerto, fuimos a por el coche donde tuvimos un pequeño incidente.
El problema fue que el vuelo de Madrid, donde venían Juan, Pablo y Olivia, se había retrasado y la compañía de alquiler solo guardaba la reserva dos horas, así que nos decían que perdían el coche. Al final, Juan y Pablo se cabrearon con la señora del mostrador y se fueron a alquilar un coche en otra compañía distinta.
Nosotros cogimos un bus al parking donde estaba el coche y nos dieron el nuestro, un Opel Astra automático bastante chulo. De ahí condujimos unos 40 minutos hasta el centro y aparcamos justo debajo del Hotel Victoria, un hotel de cinco estrellas antiguo pero muy chulo; nos impresionó bastante.
Hicimos el check-in y a los diez minutos bajamos porque, aunque habíamos quedado para cenar a las 8:30 con Willy, eran las 7:00 y teníamos un hambre que no podíamos más. Encontramos una cafetería chula y nos pedimos un gofre, café y sándwich. Papá le mandó la ubicación a Pepa y a Willy para que vinieran y estuvieron un rato con nosotros hasta las 8:15, que ya nos juntamos con el "Comando Madrid" excepto Javi que llegaba el sábado porque tenía examen.
Nos fuimos todos al restaurante, donde también venían a la cena Víctor y Héctor. El sitio era muy chulo; pedimos cosas al centro como pulpo y entremeses. Yo me pedí una milanesa empanada enorme y Eva unos casoncelli (pasta típica de esta zona), que compartimos, y estaba todo muy rico. De postre yo no pedí nada, pero el Tito Juan se pidió un salami de chocolate que, aunque no probé, tenía muy buena pinta. Al final Lucas y yo estábamos regular y agotadísimos, creo que nos pusimos malos. Llegamos al hotel y caimos redondos.Lue lisää
Día 2
22. marraskuuta, Italia ⋅ ⛅ 7 °C
El día dos empezó levantándonos prontito para aprovechar. Bajamos a desayunar al buffet y, aunque estaba todo muy bueno, había tanta gente que la comida volaba.
Salimos directos a hacer una pequeña ruta que habían preparado para ver lo principal de la ciudad. Como Javi aún no había llegado, empezamos la visita nosotros.
Estuvimos viendo las cosas típicas de Brescia, como la Piazza Paolo VI, el Duomo Vecchio (la Catedral Vieja, que es redonda y muy curiosa) y la Catedral Nueva. Justo cuando estábamos por la zona de la catedral, sobre las 9:30, nos avisaron y apareció Javi, que llegó antes de lo previsto. ¡Fue genial encontrarnos ya todos!
A la hora de comer fuimos a un restaurante que el Abu encontró de paso y fue un acierto total. Yo me pedí una carne con puré de maíz (polenta) que estaba buenísima y Eva unos casoncelli. Estaba todo riquísimo. Lo más gracioso fue lo de Lucas: leyó la carta, vio algo de filetes con gratinados con queso y se pensó que era carne... ¡y cuando llegó eran filetes de pescado! Nos reímos bastante con su cara.
De postre, Eva triunfó eligiendo una tarta de manzana de la casa y yo me pedí un helado de almendra; estaba bueno, pero tengo que admitir que la tarta estaba mejor.
La sobremesa fue divertidísima porque nos pusimos a jugar al "Impostor" (Eva, Olivia, Javi, Lucas y yo) y nos echamos unas buenas risas.
Por la tarde seguimos visitando la ciudad y llegó el dilema: subir al Castillo de Brescia. Algunos ya estaban cansados y decidieron irse al hotel a descansar, pero mi padre, el Tito Juan, Eva, Lucas, Javi y yo le echamos valor. La subida se hizo dura, pero las vistas y el castillo (el "Falcone d'Italia") merecieron la pena; lo pasamos genial.
Volvimos un momento al hotel a coger unas cosas y fuimos directos a la exposición de Willy ramos que estaba en la galería Gare 82.
Aunque pensaba que iba a ser más grande, me gustó mucho. Allí estuvimos viendo las fotos y charlando con Willy hasta la hora de cenar.
Para la cena fuimos a un sitio enorme de pizzas con muchísimas variedades y estaban increíbles. Cenamos súper bien, pero lo mejor fue la post-cena. Nos pusimos a jugar con Papá, el Tito Juan, el Tito Pablo, Lucas, Javi, Olivia, Eva, Víctor y yo. Primero jugamos al típico de ponerse un animal en la frente y adivinar con preguntas de sí o no (que a mí se me dio fatal, y me costó muchísimo adivinarlo.
Y para rematar, jugamos otra vez al "Impostor" y hubo momentos épicos. El mejor fue, sin duda, con Pablo. En una ronda, a todos nos había tocado la palabra secreta "Italia", pero a él le tocó la palabra contraria, que era "España". Total, que cuando le toca hablar para disimular, va y suelta: "Tortilla". Nos explotó la cabeza a todos y fue un ataque de risa general en toda la mesa.
Al terminar nos fuimos al hotel. Javi, Lucas, Eva y yo pensamos en salir un rato por ahí, pero la realidad es que estábamos muertos, así que abortamos misión y dimos por finalizado el díaLue lisää
DÍA 3
24. marraskuuta, Espanja ⋅ ☁️ 15 °C
Y llegamos al último día, que aunque fue breve, también fue muy bonito. Nos levantamos pronto con la idea de ir a misa de 9:00. Llegamos puntuales y aquello estaba bastante vacío, solo había un montón de monjas. Dieron las 9:05 y vimos que allí no salía nadie ni empezaba nada... miramos un cartel y, efectivamente, la misa era a las 10:00. ¡Fallo técnico! Así que nos volvimos al hotel, desayunamos tranquilamente y cogimos fuerzas.
A las 10:00 volvimos y esta vez sí. La misa fue preciosa, aunque se hizo un poco larga porque dio la casualidad de que iban a canonizar a una antigua monja. Había un despliegue increíble de curas, obispos y gente importante. La verdad es que fue emocionante, sobre todo por el coro de niños; cantaban súper bien y fue lo que más me gustó.
Al acabar volvimos al hotel, hicimos el check-out y fuimos todos a por los dos coches. Ahí tocó despedirse: como el vuelo de los de Madrid salía más tarde (a las 19:00), ellos se fueron a visitar Bérgamo. Nosotros (papá, el Abu, Eva, Lucas y yo), como salíamos a las 16:00, tiramos directos hacia el aeropuerto. Teníamos la idea de parar a ver un lago de camino, pero íbamos un poco justos de tiempo y papá prefirió no arriesgar e ir directos.
Ya en el aeropuerto, Eva aprovechó para comprar unas cosas para su familia y un regalo para su amiga, que había sido su cumple. Para comer fuimos a un sitio de pasta rápida que se llamaba Eataly, comimos bastante bien. A las 16:00 cogimos el avión y el vuelo fue genial; yo me quedé dormido casi todo el trayecto. Aterrizamos en Alicante, cogimos nuestro coche y pusimos rumbo a casa, a Murcia.
Ha sido un viaje increíble. Más allá de lo bonito que es Brescia o lo rico que hemos comido, me quedo con las risas y los momentazos que hemos vivido juntos. La verdad es que da gusto tener una familia así. ¡Ya estoy deseando que llegue el próximo!Lue lisää






































