Makati City

🇨🇭
Merklich gezeichnet vom gestrigen Tag war das Aufstehen heute sehr mühsam. Dass wir eine anstrengende Reise vor uns hatten, konnten wir zu diesem Zeitpunkt noch gar nicht richtig realisieren. Vom Hotel ging es zuerst mit dem Minivan (dieser Transport war einiges günstiger als zum näher liegenden Hafen…) zum sehr kleinen Flughafen, wo wir sogleich unser Gepäck einchecken konnten. Dann war eine Katerverpflegung notwendig und die angebotene Ramensuppe half tatsächlich ein wenig. Nach einigem Warten konnten wir dann bald einmal unseren kleinen Flieger in Richtung Cebu besteigen. Dort angekommen machten wir uns direkt auf den Weg zu den Essensständen, da der Hunger schon wieder auf der Matte stand. Nach der Verpflegung war erneutes Warten angesagt, ehe unser Flug von Cebu nach Manila startete. Der Flug nach Manila verlief ebenfalls ohne Probleme und als wir dort unser Gepäck abholten, buchten wir ein Grab-Taxi, welches uns zu unserer letzten Unterkunft auf den Philippinen bringen sollte. Nach dem Einchecken im Hotel bestellten wir (ebenfalls via Grab-App) uns noch etwas feines zu Abend essen, ehe ein langer und, den Umständen geschuldet, strenger Tag zu Ende ging.

🇪🇸
«Viaje a Manila #2»

Notablemente marcado por el día de ayer, levantarse hoy fue muy difícil. A estas alturas no podíamos darnos cuenta de que nos esperaba un viaje agotador. Desde el hotel, fuimos primero en minivan (este transporte era mucho más barato que al puerto, que estaba más cerca...) hasta el pequeñísimo aeropuerto, donde pudimos facturar nuestro equipaje enseguida. Luego era necesario comer algo para la resaca y la sopa ramen que ofrecieron ayudó un poco. Tras algunas esperas, pronto pudimos embarcar en nuestro pequeño avión hacia Cebú. Una vez allí, nos dirigimos directamente a los puestos de comida, pues el hambre ya estaba de nuevo en el tapete. Después de la comida, tuvimos que esperar de nuevo antes de que despegara nuestro vuelo de Cebú a Manila. El vuelo a Manila también transcurrió sin problemas y cuando recogimos allí nuestro equipaje, reservamos un taxi de Grab para que nos llevara a nuestro último alojamiento en Filipinas. Tras registrarnos en el hotel, pedimos una buena cena (también a través de la aplicación Grab) antes de que un largo y, por las circunstancias, duro día llegara a su fin.Meer informatie